El ambientalista piamontés J. Gasco decidió crear esta bebida siguiendo un extraño sueño. Estaba en la Guayana Francesa en busca de la legendaria Anaconda Verde y una noche se despertó repentinamente después de ver en un sueño una figura misteriosa que le ofrecía una bebida increíblemente deliciosa y decidió que tenía que recrearla. Cuenta la leyenda que esta criatura era el hombre-gallo impreso en la etiqueta de las botellas. Su receta original sigue siendo la base de la actual.
Formato: 200ml